Un estudio realizado por Peter Molan, profesor de Bioquímica de la Universidad Waikato, en Nueva Zelanda, ha concluido que la miel de abejas contiene una enzima que impide el crecimiento de ciertas bacterias que atacan la dentadura de las personas. En palabras del profesor Molan “La investigación ha demostrado que la miel no solo detiene el crecimiento de las bacterias de la placa dental, sino que reduce la cantidad de ácido producido lo cual impide que las bacterias hagan dextrano (…) La investigación clínica muestra que los tipos de miel seleccionados limpian rápidamente de bacterias las heridas infectadas aún en casos donde la infección es profunda”.
No obstante, cabe indicar que no se debe abusar del consumo de cualquier tipo de endulzante, ya que la ingesta de azúcares en exceso contribuye a la proliferación de las bacterias que atacan la dentadura. Como todo, la miel de abejas debe consumirse de manera responsable.
Fuente:
- https://www.elmundo.es/elmundo/2001/03/02/ciencia/983556929.html